Para prepararse:
125 g de granos de avellana molidos
100 g de trozos de piña seca y confitada
Por la pasta:
2 huevos
150 g de azúcar
1 paquete de azúcar de vainilla
125 g de almendras molidas y despojadas corteza
rallada de 1/2 limón orgánico
1/2 botella de aroma de ron
1 paquete sabor navideño
También:
3 grandes obturadores rectangulares (unos 12 × 20 cm)
Para el casting:
100 g de glaseado de chocolate negro
- Para preparar las avellanas dándoles la vuelta en una sartén sin grasa, asarlas y dejarlas enfriar en un plato. Corta la piña en pequeños trozos.
- Para la masa, pongan los huevos en un tazón y revuelvan con una batidora de mano con un batidor durante unos 2 minutos hasta que estén muy espumosos. Añade el azúcar y el azúcar de vainilla y revuelve durante otros 2 minutos. Mezcla el resto de los ingredientes y dóblalos en la espuma junto con las nueces y los trozos de piña.
- Coloca las tapas en una bandeja de horno (cubierta con papel de horno) y cepilla la masa. Deja libre un borde estrecho. Empuja la bandeja de hornear en el horno. Calor superior/inferior: 140° - 160° C (precalentado). Aire caliente: 120° - 140° C (precalentado). Gas: alrededor del nivel 1 (precalentado). Tiempo de cocción: unos 25 minutos
- Deje que la pasta se enfríe en un estante para pasteles y luego córtela en pequeñas pastillas.
- Para el glaseado, cortar la cobertura en trozos grandes y mezclar en una pequeña olla al baño maría a fuego lento hasta obtener una mezcla suave. Sumerge las pastillas parcialmente en la costura.
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